trabajo a tiempo parcial

La jornada de trabajo a tiempo completo se podría calcular, por ejemplo, sobre una base diaria, semanal, mensual o incluso de un año, o como media de un período de empleo. Las mujeres están sobrerrepresentadas en el trabajo a tiempo parcial y, por lo tanto, sufren desventajas, como, por ejemplo, su salario es insuficiente para alcanzar la independencia económica, tienen menos oportunidades profesionales y menos derechos de pensión, sobre todo, cuando están contratadas en trabajos a tiempo parcial precarios. No obstante, los trabajos a tiempo parcial de calidad pueden contribuir al incremento de la participación de la mujer en el mercado laboral. Las tradiciones varían según los países respecto a cómo los interlocutores sociales consideran el trabajo parcial en general y en particular. El trabajo a tiempo parcial puede verse como un producto final que refleja los roles tradicionales de género, insistiendo en las desventajas que ofrece en lo que respecta al salario, los ascensos, los derechos de pensión, etc. Por otra parte, puede considerarse un instrumento para aumentar la participación en el mercado de trabajo, aumentando, así, hasta cierto punto, la independencia económica de las mujeres.